Escala de pescado y diseño en espiga: entienda la diferencia
El orden en que se instala el suelo marca la diferencia en el resultado final de un proyecto de construcción. Consulte nuestros consejos sobre suelos en escamas de pescado y en espiga

Las baldosas rectangulares ofrecen distintas posiciones posibles de instalación, como las baldosas en escama de pez y en espiga.
Ambos presentan el patrón en zig-zag, que está ganando terreno y convirtiéndose en tendencia en decoración. Este estilo tiene un perfil más dinámico y versátil y puede utilizarse de distintas formas y en distintos ambientes de un proyecto de interior.
Los suelos en escamas de pescado y en espiga son bien conocidos. Se parecen mucho y por eso se confunden a menudo, pero la principal diferencia es el ángulo de aplicación con respecto a la pared.
Formule sus preguntas a continuación.
Recuerde: ¿qué es la distribución del suelo?
La distribución del suelo se refiere a la planificación de cómo debe aplicarse un revestimiento de suelo en una habitación. Permite crear diferentes direcciones y diseños para que cada baldosa encaje en el espacio con el máximo aprovechamiento.
Entre los principales tipos de disposición se encuentran la enrasada, la vertical, la horizontal y la en zigzag. Su elección dependerá de la forma, el color, el diseño y el corte de cada pieza, así como de las medidas del área donde se colocarán las baldosas.
¿Cuál es la diferencia entre las escamas y las espinas de pescado?
La principal diferencia entre el alicatado en escama y en espiga es el ángulo de colocación de las baldosas con respecto a la pared. Esto se aplica tanto a suelos como a paredes.
En ambos tipos de disposición, dos baldosas se instalan en un ángulo de 45º entre sí. El ángulo con la pared es de 90º para la escama de pez y de 45º para la espiga.
Por estas características, la disposición en espiga suele ser la preferida para paredes de ladrillo o baldosas subterráneas, por ejemplo. La escama de pescado, en cambio, suele verse en suelos, sobre todo en pavimentos con superficies de drenaje.
A continuación encontrará más información sobre las características de cada tipo.
Diseño de escamas de pez

En la disposición en escama de pez, las baldosas se intercalan horizontal y verticalmente, formando ángulos de 45º entre ellas. Forman un ángulo de 90º con la pared y, visualmente, sus encajes crean letras L continuas.
Este tipo de patrón va bien con una decoración más retro, ya que se solía utilizar para instalar parqué, un material de madera que se utilizaba a menudo en el pasado para cubrir los suelos.
La escama de pescado es ideal para habitaciones en las que se desea acentuar la amplitud. Además, al calcular el número de piezas necesarias en el momento de la compra, es necesario tener en cuenta la pérdida del 30% debido a los recortes.
Diseño en espiga

Este tipo de suelo tiene características similares al suelo de escamas de pescado. La diferencia es que las baldosas se instalan formando un ángulo de 45º con las paredes. De este modo, se colocan en diagonal a lo largo de la habitación y forman visualmente una letra V cuando encajan entre sí.
Este patrón acentúa la altura de las paredes y confiere a la habitación un aspecto clásico y contemporáneo. Al igual que con el otro patrón en zigzag, es necesario tener en cuenta la pérdida del 30% al calcular la cantidad para cada habitación.
Ideas para utilizar este tipo de diseños
Ahora que ya conoce la diferencia entre los patrones de escamas de pescado y de espiga, eche un vistazo a algunos proyectos de interior en los que se utilizan estos patrones:
En el revestimiento del baño
El alicatado del cuarto de baño ofrece infinitas posibilidades. Esto se debe a que la estancia suele ser húmeda, lo que requiere material desde el suelo hasta el techo -especialmente cuando el espacio cuenta con una zona de baño-.
Además de mezclar distintas posiciones del suelo, puede armonizar colores y texturas al elegir el acabado. Utilizar un patrón de espiga en una pared de ducha, por ejemplo, creará una textura distintiva en su cuarto de baño.

Para un look retro y romántico, la mejor apuesta es combinar dos colores de revestimientos que armonicen, como el blanco y el rosa o incluso el verde.
En la pared de la cocina
El blanco y los tonos claros son los favoritos a la hora de revestir las paredes de la cocina. Para los que quieran seguir esta tradición y no les gusten los colores vivos, utilizar un diseño diferente es una gran opción.
Tanto los colores en escama de pez como en espiga crean un efecto superdiscreto en la pared sobre la encimera. La opción es utilizar una mezcla de colores claros y crear puntos visuales sutiles o incluso crear un degradado de tonos que armonicen entre sí.

En el suelo del salón
Las baldosas en espiga y escama de pez aportan movimiento y elegancia al suelo del salón. El gres porcelánico inspirado en la madera es la mejor opción para esta estancia, ya que reproduce los matices del material natural.
Con esta misma pieza, podemos crear un salón de estilo contemporáneo y moderno. Basta con mezclar revestimientos con tonos de madera más claros y más oscuros.

En el dormitorio
La disposición en espiga también puede utilizarse en el dormitorio. Crear una media pared detrás de la cama con paneles, por ejemplo, no solo da un efecto distintivo, sino que también sustituye al cabecero.
Y los colores de los suelos pueden variar: los tonos grises están entre los favoritos de la decoración moderna. En los dormitorios de matrimonio, los suelos clásicos inspirados en la madera son los favoritos.

El acabado de una habitación es una de las fases más importantes de un proyecto de construcción o renovación, y la distribución del suelo marca la diferencia. Hoy analizamos en detalle cómo pueden utilizarse la escama de pescado y la espiga en determinados espacios.